¡Menudo día más intenso el de hoy! Nos ha venido a buscar el mini-bus a las 8h de la mañana para llevarnos hasta el “Ferry” que nos ha traslado hasta la isla de Gozo, la segunda en tamaño del país. Una vez en Gozo, nos esperaba otro mini-bus para hacer una pequeña ruta por la isla. Primero hemos ido a Victoriosa, la capital, aunque los habitantes de Gozo la siguen llamando Rabat debido a su pasado árabe. En la capital estaban de fiesta que consiste, fundamentalmente, en sacar las estatuas de todos los santos y colocarlos de uno y otro lado de las calles. Nos hemos adentrado también en la ciudadela desde donde se divisa el paisaje de la isla. Hemos visto también como dos curas tocaban, estirando de una cuerda, las campanas de la catedral. Tras comer, nos hemos dirigido hacia San Lawrenz donde se encuentra lo que se conoce como el “Blue hole”, el “Agujero Azul”, que es un agujero en la roca formado debido a la erosión y al paso del tiempo. Después hemos querido bañarnos pero uno de nuestros compañeros ha pisado un erizo de mar y hemos decidido volver a Malta. Mientras esperábamos el “ferry” de vuelta a casa, nos han ofrecido ir hasta Malta en una “speed boat” por el mismo precio. ¡La improvisación no has salido redonda! Nos han dado una vuelta para que viéramos las grutas de la isla de Comino. ¡Increíble! El agua cristalina que mucha gente paga por ver. Una vez en el hotel, el médico ha llegado y se ha puesto manos a la obra para sacar las puntas de los erizos de nuestro pobre Jordi. Por la noche, para acabarlo de rematar, nos ha tocado bailar (después de haber bailado de un sitio a otro como locos durante todo el día) en el club deportivo de Marsaskala, donde fuimos a jugar a futbol y ping-pong en otra ocasión. ¡Ha estado muy bien! Hoy tenemos que despedirnos de los franceses del grupo de Easy! Da pena que se marche la gente con la que has compartido tan buenos momentos.
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